En esta ocasión queremos hablaros de otro modelo icónico de Seat: el Seat 850. Este coche compacto y deportivo fue uno de los modelos más populares en España durante los años 60 y 70, y sigue siendo muy querido por los aficionados a los coches clásicos.
El Seat 850 fue presentado en 1966 como el sucesor del popular Seat 600. Este modelo fue diseñado para ser un coche más deportivo y potente que su predecesor, y contaba con un motor trasero de 4 cilindros de 843 cc y 47 caballos de fuerza. Además, el 850 tenía un diseño más aerodinámico y elegante que el 600, lo que lo hacía aún más atractivo para los compradores.
El Seat 850 es un coche muy ágil y deportivo. Con su motor trasero y su peso ligero, el 850 es muy divertido de conducir en carreteras sinuosas. Además, el 850 tiene una suspensión deportiva que lo hace aún más emocionante en carreteras con curvas.
El diseño del Seat 850 es otro de sus puntos fuertes. Con su carrocería elegante y aerodinámica, el 850 es un coche que llama la atención en la carretera. Además, el 850 tenía una parrilla frontal distintiva que lo hacía fácilmente reconocible.
El interior del Seat 850 es modesto pero funcional. Los asientos son cómodos y ofrecen suficiente espacio para dos personas, mientras que el panel de instrumentos es simple y fácil de leer. Además, el 850 cuenta con un techo corredizo que permite disfrutar del sol y del aire fresco en los días de verano.
En resumen, el Seat 850 es un coche que representa una época muy especial en la historia del automóvil español. Con su diseño deportivo, su manejo emocionante y su asequibilidad, el 850 se convirtió en un coche muy popular entre los jóvenes españoles en los años 60 y 70. Hoy en día, el 850 es un coche muy buscado por los coleccionistas y los amantes de los coches clásicos.
